Infancia

Juan se convirtio en el menor de los varones, y sus padres le procuraron mimos y cuidados. Tuvo siete hermanos: Francisco, Javier, Mariano, Alegria, Rosa, Juana e Isabel. Su niñez transcurio no solo en su casa, sino támbien en la cercana quinta de Ficoa.
Sus primeros años transcurrieron entre Ambato y Ficoa alegre y vivaz. En 1836 sufrió de viruelas y quedó con el rostro marcado. El 39 ingresó a la escuela del maestro Romero donde conoció al presidente Rocafuerte que estaba de paso a Guayaquil. El 46 viajó a Quito para estudiar Gramática Latina en el Convictorio de San Fernando, donde descolló por su extraordinaria memoria y amor al silencio y a la soledad, pues se había vuelto un joven serio y de pocos amigos.