Geometra Moral
Don Juan Tenorio es una figura del libertinaje, un amante terrible porque tiene un gran prestigio entre las mujeres, con Molière compuso una de sus obras maestras. En Don Juan Tenorio hay mucho de Don Juan Fausto, el diablo en forma de amigo, es valiente, lisonjero. El amor de este demonio es un materialismo atroz porque su alma es dura y malvada. Atrevido incrédulo, invita a las estatuas a comer, las estatuas vienen de noche, toca a su puerta, el ruiseñor tiembla, pero no huye, Don Juan puede enfrentarse al mismísimo Satanás. Don Juan es un bribón interesante. Su alma es del diablo, vive sumido en una negra tristeza y hace infeliz al Doctor Fausto. Tenorio es feliz y vive su camino tormentoso, matando la felicidad y arrastrando virtudes.
Lovelace es infame, cuando lo vemos elegante, dando fe y amor, lo cargamos de verdadero cariño, pero no se puede evitar andar de puntillas hacia el vil que secuestra con mentira, y encarga a una virtuosa joven que la deposite en una casa de prostitución. Clovis exclamó cuando se enteró de las obras de los judíos hacia Jesús. "Que me encontré allí con mi látigo", exclama cualquier hombre generoso enamorado. Clara Harlowe despertando de su sueño, mirando a las mujeres de esta infame casa, asustado, sorprendido, cubierto de vergüenza e infelicidad, victima de la decepción, ayer señorita de la nobleza; hoy una chica de alquiler, ayer adorado por un hombre, ahora se burlaba, no podia encontrar consuelo. Clara muere, muere el dolor.
El corazón de Don Juan Tenorio, Don Juan Francés y Lovelace es un polígono, cada uno amando a una mujer. Si nos preguntamos qué cosas influyen más favorablemente en las mujeres que nosotros, no podemos establecer una regla empirica sin exponernos a erroresgraves. Las personas comunes son dos almas de diferentes maneras y las unen con los lazos del amor. El destino es un símbolo de la filosofia que ejerce con voluntad. Esclavos, sirvientes de hombres, que cumplen órdenes. El destino es providencia, es orden de Dios y todo está dicho. Sale la felicidad o la desgracia.